Clases de Trastornos Mentales



Listado de algunos de los trastornos mentales




Trastorno de Identidad Disociativo:
También conocido como “trastorno de personalidad múltiple”. Se caracteriza por la presencia de uno o más estados de identidad o personalidad que controlan el comportamiento del individuo de manera recurrente, junto a una incapacidad para recordar información personal importante.





Trastorno Antisocial de la Personalidad:
Las personas que sufren este tipo de trastorno siguen un patrón general de desprecio y violación de los derechos de los demás, o principales reglas o normas sociales.
Suelen ser sujetos irritables y heteroagresivos. No se preocupan por su seguridad ni por la de los demás. Tratan de manipular a los demás con el fin de conseguir provecho o placer personal. Son personas completamente irresponsables y no suelen sentir remordimientos por sus actos.






Esquizofrenia:
La esquizofrenia es un concepto que abarca un grupo de trastornos graves, que normalmente se inician en la adolescencia. Los síntomas son agudas perturbaciones del pensamiento, la percepción y la emoción, que afectan a las relaciones con los demás, con un sentimiento perturbado de uno mismo y una pérdida del sentido de la realidad que deteriora la adaptación social de quien la sufre. La idea de mente dividida implícita en la palabra esquizofrenia se refiere a la disociación entre las emociones y la cognición, y no, como vulgarmente se supone a menudo, a una división en la personalidad, que más bien tiene que ver con otro tipo de trastornos como la personalidad múltiple que en la clasificación kraepeliniana sobre los trastornos se llamaban psicopatías.



Paranoia:
 Las personas con un trastorno de personalidad paranoica son altamente recelosas de los demás y como resultado limitan su vida social de manera drástica. Con frecuencia sienten que están en peligro y buscan evidencia para apoyar sus sospechas. Las personas con este trastorno tienen dificultad para ver que su desconfianza es desproporcionada para su entorno.




Demencia:
este desorden ser relaciona con la degradación de las capacidades intelectuales. Estos pacientes suelen perder facultades de atención, la memoria e incluso la posibilidad de pensar en abstracto. Algunos de los síntomas son la imposibilidad de resolver cuestiones básicas y corrientes, como abrir puertas y además suelen perderse regularmente. Un ejemplo de esta enfermedad es aquella que comienza pasados los cincuenta años de edad, el llamado mal de Alzheimer







Trastornos por ansiedad:
(ansiedad) estado emocional displacentero de miedo o aprensión, bien en ausencia de un peligro o amenaza identificable, o bien cuando dicha alteración emocional es claramente desproporcionada en relación a la intensidad real del peligro. Se caracteriza por una gran variedad de síntomas somáticos como temblor, hipertonía muscular, inquietud, hiperventilación, sudoraciones, palpitaciones, etc. Aparecen también síntomas cognitivos como aprensión e inquietud psíquica, hipervigilancia y otros síntomas relacionados con la alteración de la alerta (distraibilidad, pérdida de concentración, insomnio). Se distingue entre la ansiedad situacional, debida a una etiología específica, y la generalizada, sin evidencia de un factor desencadenante asociado.




Estrés:
generalmente las personas sufren estrés ante situaciones críticas, sea porque no se siente capaz de realizar ciertas actividades o por los riegos que las mismas pueden producir. Generalmente se expresa mediante el nerviosismo y la inquietud. Suelen ser personas hurañas y les cuestas adquirir nuevos conocimientos.



Psicosis:
Es un desorden mental severo que se manifiesta en comportamiento, reacciones e ideas anormales. La persona no es capaz de enfrentarse con las demandas de su medio ambiente. Una persona psicótica difiere de la persona neurótica en que esta última ha tenido éxito en realizar un ajuste a su medio ambiente, la naturaleza de este ajuste consistiendo generalmente en la neurosis.




Anorexia nerviosa:
Es un trastorno alimentario que lleva a que las personas pierdan más peso de lo que se considera saludable para su edad y estatura.

 Las personas con este trastorno pueden tener un miedo intenso a aumentar de peso, incluso cuando están con peso insuficiente. Es posible que hagan dietas o ejercicio en forma excesiva o que utilicen otros métodos para bajar de peso.



Bulimia:

Es una enfermedad por la cual la persona come en exceso o tiene episodios regulares de ingestión excesiva de alimento y siente una pérdida de control. La persona utiliza luego diversos métodos, tales como vomitar o consumir laxantes en exceso, para evitar el aumento de peso.





Trastornos de la afectividad:
Son aquellos en los que el síntoma predominante es una alteración del estado de ánimo. El más típico, la depresión, se caracteriza por la tristeza, el sentimiento de culpa, la desesperanza y la sensación de inutilidad personal. Su opuesta, la manía, se caracteriza por un ánimo exaltado, expansivo, megalomaníaco y también cambiante e irritable, que se alterna casi siempre con el estado depresivo.






Trastorno bipolar:
Es una afección en la cual las personas alternan entre períodos de un estado de ánimo muy bueno o irritable y depresión. Las "fluctuaciones en el estado de ánimo" entre manía y depresión pueden ser muy rápidas.